Recordemos una serie de consejos para “digerir” estos días de Navidad con mejor salud:
Los días de celebración, festivos, de cenas… son muchos, pero no tantos. Si sumamos todos esos compromisos, seguro que no llegan a 6-8 en total. Aproximadamente tenemos unos 15 días lectivos o más, durante las 3 semanas de la Navidad, así que el primer consejo es hacer nuestra rutina diaria durante estos días, cuidándonos un poco más, para compensar, y haciendo ejercicio físico.
18 Consejos de alimentación saludable en navidad
- Disfruta de los platos tradicionales de tu hogar: es el mejor momento para hacerlo. Si hay una época en la que debemos permitirnos ciertos caprichos y elaboraciones más preparadas, con más calorías y copiosas, es la Navidad. Aunque hay que mantener un control, las tradiciones no se deben perder y es importante que mantengas tus costumbres y disfrutes saboreando los platos típicos de tu familia.
- Planificar bien y con tiempo el menú: tanto de las comidas especiales como del resto de días. Los días especiales suelen estar bien pensados previamente, sin embargo, esos días que quedan en medio de las celebraciones solemos caer en la improvisación. Es importante que tengas previsto lo que vas a preparar y la compra esté hecha con antelación.
- Comprar la cantidad necesaria: siempre sobra mucha comida que acaba en la basura, o comiendo días después de la Navidad, incluso hay productos que continúan en casa meses después!! Seamos prudentes y compremos con cabeza. Es muy probable que la familia no se quede con hambre y si se acaban los dulces o los picoteos, los comercios siguen abiertos así que si ocurre, puedes hacerte con nuevos productos sin problema. No caigas en el error de sobrealimentar a los tuyos.
- Prepara entrantes ligeros: antes de servir los platos fuertes, es costumbre tomar unos entrantes o tentempiés… Teniendo en cuenta que los platos principales son suficientes para saciarnos, es conveniente que los entrantes sean ligeros, a base de ensaladas, alimentos poco salados y grasos, cremas, caldos o incluso elaboraciones con frutas.
- No compenses con ayunos: saltarse comidas o hacer ayunos prolongados no es la solución. Nunca debemos compensar comidas copiosas con ayuno. Siempre será mejor, realizar ejercicio físico, disminuir un poco las cantidades en las celebraciones y hacer en casa comidas más ligeras como ensaladas, pero no dejar de comer por compensar y menos si tienes apetito.
- No coloques los dulces navideños a la vista: únicamente sacarlos a la mesa los días especiales; si no, estaremos picando a cualquier hora del día. Es muy tentador preparar una bonita bandeja con mazapanes, polvorones, turrón… Pero dales protagonismo solo cuando corresponde, no todo el mes.
- Come mucha fruta: Antes de las grandes celebraciones, tomar una pieza de fruta o unos frutos secos al natural, nos ayudará a controlar el apetito al sentarnos a la mesa. Además, este tipo de comidas y cenas se atrasan mucho en horario y rompen nuestra rutina diaria.
- Controla las cantidades: elige lo que más te guste y saborea cada bocado, no te dejes llevar por la gula. En estas ocasiones comemos más de lo habitual sin darnos cuenta y si te pasas, es probable que después te sientas mal a nivel digestivo, no merece la pena.
- No te olvides de beber agua: Nuestro organismo necesita una correcta hidratación, y en Navidad, las necesidades se pueden ver aumentadas por la ingesta de alcohol y alimentos ricos en sal, y con las calefacciones.
- Retirar los dulces: para seguir charlando en las sobremesas, es recomendable que los dulces no estén presentes constantemente en la mesa. Las reuniones se alargan mucho y tendemos a picar sin darnos cuenta. Colocar una fuente con fruta troceada nos ayudará a combatir la ansiedad por comer, mantenernos hidratados y elegir una opción más saludable.
- Evita los turrones sin azúcar: consumir dulces navideños sin azúcar o para diabéticos no aporta muchos beneficios, no creas que no te aportan calorías, sí lo hacen. Aunque se sustituye el azúcar por edulcorantes, siguen siendo productos muy energéticos por su contenido en harinas o frutos secos y los edulcorantes tienen efectos nocivos sobre nuestro intestino.
- Evita el picoteo entre horas: estos días ya hay suficiente comida como para picotear alimentos procesados, azucarados, grasas o sal antes y después de las comidas principales. Si es por capricho, aguanta, si es por hambre, come fruta.
- Come despacio: es importante ingerir los alimentos con tranquilidad y masticando bien. Así podrás digerirlos mejor, saborearlos y ser más consciente de tu saciedad.
- Abrígate bien: recuerda que hay que abrigarse bien y procurar que también lo hagan los más mayores de la familia, ya que el frío puede producir cortes de digestión cuando se ha comido demasiado.
- Realiza ejercicio físico: aprovecha que tienes más tiempo para dar buenos paseos en familia, practicar deportes que no haces habitualmente o aumentar la intensidad de los que realizas durante el año de forma rutinaria. El deporte te ayudará a mejorar las digestiones, controlar el peso y conciliar el sueño, además de sentirte mucho mejor que si te quedas en el sofá.
- Come frutas como la piña, naranja, mandarina o la papaya: facilitan la digestión y tienen potente efecto antioxidante, que contrarresta el efecto nocivo de alcohol y grasas.
- Aumenta el consumo de verduras: Alimentos como la escarola, endivias, alcachofa, cardo, espárragos, apio… ayudan a mejorar el metabolismo a nivel renal y hepático. Podemos poner una ensalada con estos ingredientes como entrante.
- Cuida de tu familia: Si tienes algún familiar diabético, hipertenso, con alguna enfermedad coronaria, ácido úrico… debe ser vigilado por toda la familia. En Navidad se producen muchos ingresos debido a los excesos y en pocos días se pueden producir muchos problemas de salud.
Recetas saludables para navidad
Si quieres aprovechar los días de fiesta para cocinar platos navideños, te dejamos algunas propuestas que puedes hacer con los más pequeños de la casa, es una manera perfecta de pasar tiempo juntos en casa!
- Cazuela de rape
- Tartar de aguacate salmón y fresas
- Langostinos con leche y coco
- Merluza con costra pistachos y crema de guisantes
- Galletas navideñas de mantequilla
- Árbol de navidad de frutas
Una dieta personalizada para navidad
No creas que no es posible cuidarse durante la Navidad, por supuesto que es momento de disfrutar y de comer alimentos que habitualmente no consumimos, darnos ciertos caprichos y no tener remordimientos. Sin embargo, tampoco es agradable encontrarse mal tras las comidas copiosas, sufrir consecuencias importantes en la báscula acabadas las fiestas o poner en riesgo la salud en caso de padecer alguna patología… por eso, te proponemos que te dejes guiar por nuestro equipo, para que te asesoremos en tus cuidados también durante las fiestas, para que te orientemos en las celebraciones y para ayudarte a mantener un buen equilibrio entre la salud y el disfrute.
Este acompañamiento lo hacemos tanto presencial como online.
Recuerda que puedes contar con profesionales de las siguientes disciplinas:
Psicóloga
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